Arte Contemporáneo Latinoamericano

Este escrito pretende abordar las vanguardias artísticas, como parte del arte contemporáneo latinoamericano, siendo producto de características y transformaciones económicas, políticas y sociales a partir del siglo XX. El arte, como forma de expresión de sentimientos y emociones de carácter reflexivo, expresa la dinámica social, y en este caso, la vanguardia política e ideológica que acontece en América Latina. Como toda actividad humana las artes visuales están determinadas culturales y socialmente, y en el entorno social se articulan los elementos que el artista tiene a su alcance para que sea influenciada su obra. En este caso, el reconocimiento y difusión de las obras y de los artistas contemporáneos depende en gran medida de los medios de información y mecanismos que legitiman los eventos artísticos. Si bien en primera instancia, la obra de arte respondía a un proceso creador, actualmente podemos pensarlo como un recurso complementario del “consumo”. De esta manera, concebido como una producción cultural, el arte contemporáneo no se considera como una expresión intima de un genio que se eleva sobre el común de los mortales, ni como el producto de un miembro de una clase social, como lo estudiaba el marxismo. El arte contemporáneo ha sido una práctica que crea sus propios sistemas de producción, distribución y consumo, que demandan una posición crítica y conducen a una escena teórica distinta. En el arte contemporáneo, y en especial las vanguardias artísticas, los artistas rompen con el papel que les asignan los medios o los críticos de arte; manifiestan descontento ante esa situación y provee símbolos alternativos para los grupos subalternos, a la vez que conspira contra aquellos emblemas que expresan el poder de las clases dominantes. Debido a que, la característica primordial del vanguardismo es la libertad de expresión, punto esencial para el estudio de las vanguardias. De esta manera, se enmarca la posición social del artista y su lucha por su reconocimiento social. Por ello, cabe resaltar las siguientes preguntas ¿Cuál ha sido el papel de los artistas visuales en América Latina y cuál es el mensaje que se transmite hacia el público? Si ya no es un arte que exalta los valores individuales, ¿cuál es la manifestación artística que se está generando en los espacios de creación? Si bien en una primera etapa que comprende principios del siglo XX, el arte respondía a una representación nacional [por ejemplo el Muralismo mexicano, famoso por su contenido social ] y se mostraba una cultura, patrimonio e identidad nacional a través del realismo con la pintura que retrataba la pobreza, exilio desplazamientos, la situación de obreros y trabajadores del campo; a partir de la década de los setenta y ochenta; las artes visuales se exponen a partir de representaciones abstractas donde el artista muestra su experiencia individual en una dimensión colectiva. Así pues en el panorama socio- político de la época; los monumento, la pintura, el grafiti, performance , y las esculturas erigidas en honor a los sobresalientes personajes o anécdotas sociales trascendentales , se convirtieron en íconos que, reivindicaban las demandas del pueblo y exigían un cambio radical en la sociedad o bien, fungían como representaciones de un acontecer cotidiano y de la dinámica social imperante en la época. Por ello, los estudios sociales del arte y el sociólogo del arte, no debe separar nunca el arte de la realidad, debe examinar los hechos sociales, sus causas, y su naturaleza en función de lo que debería ser y lo que es ante el público. Debe existir el elemento social que enuncie las interacciones humanas a lo largo del tiempo, donde se van creando una serie de conceptos, ideas, de sentimientos colectivos en los que se inspira necesariamente el artista. Considerar, asimismo, que el arte es construido en las luchas por la “legitimidad cultural, la distinción simbólica y los conflictos sociales de su época”, y donde cada momento histórico determina la manera en que conviven las distintas formas de ver la realidad (antiguas y nuevas ideas).